A veces saber lo que no queremos nos da muchas pistas de aquello que sí, ¿verdad?
Hoy hacemos un repaso de los regalos de los que queremos huir. No sea que nos despistemos y acabemos obsequiando a las personas que queremos justamente aquello que odiamos:
- No regales productos basura. Nada de baratijas cuquis de mala calidad -que cubren necesidades inexistentes- y que duran menos que el primer turrón del año. Huye también de la ropa de mala calidad, que será desechada después de siete usos y, desde luego, de cualquier producto sobreenvasado. Piensa que en el mes de diciembre producimos un 30% más de residuos que en otros meses del año.
- No regales explotación laboral ni esclavitud. Si ese producto es tan barato, será porque alguien no está ganando un salario justo. Un dato: la industria textil es de las 5 con mayor riesgo de trabajo infantil en África, Asia y América Latina. Así que, si no sabes quién ha cosido esa camiseta, piénsatelo dos veces antes de comprarla.
- No regales discriminación a mujeres y niñas. ¿Sabías que representan el 58% de las personas sometidas a trabajo forzoso, sin tener en cuenta las que trabajan en comercio sexual? Y si hablamos, de nuevo, del sector textil, nos encontramos con que la mayoría de las trabajadoras son mujeres. ¡Así que huye del Fast Fashion!
- No regales maltrato animal. Parece mentira, pero aún en nuestros días hay marcas de cosmética de lujo que experimentan con animales. ¡Imagina qué quedará para muchas marcas más baratas! Estoy segura de que tú no quieres regalar ese sufrimiento a ninguna persona querida.
- No regales productos hechos en la otra punta del mundo. O, más bien, no lo hagas a la ligera. Por si no lo teníamos claro ya, estos últimos meses han puesto en evidencia los problemas logísticos de la deslocalización de la producción. Y, desde luego, cuando compramos productos hechos en países con menores regulaciones de sostenibilidad, podemos esperar cualquier cosa. Así que, si compras algo producido lejos de casa, intenta que se trate de productos de comercio justo.
Conclusión: Tus regalos van más allá de quien los recibe
Cuando compras un obsequio, puedes llegar mucho más allá de la persona que lo recibe.
Tu compra también puede ser un regalo para las personas que están detrás de su producción. De hecho en cierta forma lo es siempre. Porque, ya sabes, cada vez que compras un producto, apoyas y refuerzas todo el sistema que lo sostiene y lo hace posible. Y mejor premiar a quien mas lo merece. ¿verdad?
Por eso es tan importante escoger regalos sostenibles. En el enlace anterior tienes algunas ideas. Se trata, simplemente, de regalos alineados con nuestros valores de ecologismo, solidaridad, sostenibilidad y ética.
Además, aunque la mayor parte de nuestros productos son veganos y todos son cruelty free, te invitamos a pasearte por esta recopilación de ideas de qué regalar a una persona vegana. Algunos de los productos son de nuestra tienda online de moda sosteniblee y productos éticos, y otros tantos son de marcas amigas a las que admiramos.
Porque, al hacerlo, de alguna forma también estamos regalando esos valores y, al mismo tiempo, estamos mostrando un gesto de agradecimiento y respeto con todas las personas que están detrás del producto. De hecho, nosotras también recibimos nuestro propio regalo y es ese gustazo que nos queda por dentro cuando sabemos que hemos hecho las cosas realmente bien.
¿Sabes a qué me refiero?